Palabras correctas e incorrectas
He aquí otro ejemplo. A la mujer que le imploraba al Todopoderoso, "Oh Dios, Tú no puedes hacer eso", se le murió su bebé en sus brazos. En contraste, estaba otra mujer cuyo bebé probablemente estaba igual de enfermo, tan cerca de la muerte como el otro. Su súplica era: "¡Oh Dios, permite que mi bebé viva, permite que la vida se sostenga, permite que se sane!" Y la bebé vivió y se sanó.
Noten la diferencia en los enfoques positivos y negativos.
No digan, "Dios, no dejes que me enferme". En vez digan, "Dios, permíteme estar fuerte y bien". Observen sus palabras negativas. Una buena expresión para utilizar es: "Dios, fortaléceme en mi deseo de mantenerme en lo correcto. Cúbreme en todo momento, de manera que yo haga Tu Voluntad que también es mi voluntad, para siempre ser Tu hijo perfecto, bendiciéndolo todo a mi paso".
Había una mujer que siempre decía, "Oh Dios, trata Tú mi incredulidad". De cualquier punto de vista, ¿no sería mejor decir: "Barre mis dudas y temores, Oh Dios, y reemplaza todo lo que sea menor que Tu Perfección con Tu gran Conciencia de Perfección. Permíteme estar en tu gran Luz y produce Tu Belleza y Perfección en la Tierra. Te doy las gracias"
William J. Cassiere ("Brother Bill") "La Ley de Precipitación"