martes, 11 de mayo de 2021

 Controlar el poder de la visión, mediante la atención

El ojo es la cámara de la mente. Utilizar conscientemente su actividad visualizadora, es una de las maneras más fáciles de ayudar a la memoria a retener la información que desea mantener.

Todos deberían recordar a menudo que, a través de la actividad de la visión, la energía en el cuerpo emocional puede ser sacudida a la acción instantáneamente. Por tanto, hasta que se le enseñe a la humanidad la necesidad de controlar la atención — a través tanto de la visión como del pensamiento — habrá poca esperanza de tener una armonía permanente en la vida del individuo.
A todo el mundo debería enseñársele desde la primera infancia, a exigir obediencia de sus ojos así como también de sus manos y sus pies. A los ojos debería enseñársele a conscientemente ver únicamente aquello que producirá perfección en la mente, en el cuerpo y en el mundo del individuo. Debería enseñárseles también a dejar por fuera lo que no sea perfección, ya que las vibraciones de todo aquello sobre lo cual la visión se enfoca, fluyen de vuelta al cerebro, cuerpo y mundo de quien lo contempla.
Por tanto, comencemos a hablarle a nuestros ojos con autoridad severa, ordenándoles que vean únicamente la Perfección de la Presencia en Luz Blanca Flamígera donde quiera que vayamos.
Nuestro primer deber, entonces, será el de observar cuidadosamente la Pura Luz Blanca doquiera que la veamos. Auto-entrenémonos para reconocerla y bendecirla, recordando que es el Regalo de nuestra Magnífica Presencia I AM; y que sin la Luz, no podemos hacer nada. CON LA LUZ, PODEMOS HACERLO TODO.
La Pura Luz Blanca es el almacén de todo Poder y Perfección. Por tanto, practiquemos este mes a hacer ver a nuestros ojos un FLAMEANTE SOL de PURA LUZ BLANCA descendiendo desde el Corazón de nuestra propia Magnífica Presencia I AM,
y cubriendo todo lo que vemos que sea inferior a la belleza y la Perfección.
Al principio, es más fácil cerrar los ojos e imaginar esto durante algunos instantes, y luego invocar a su Presencia para que lo proyecte. Más adelante, estarán en capacidad de hacerlo con los ojos abiertos. No se pongan tensos al hacer esto, sencillamente sientan un gran regocijo al utilizar esta actividad de la Luz.
De esta manera, cerramos nuestras mentes y cuerpos al flujo de energía proveniente de esas cosas que no son constructivas. Luego, al tiempo que mantenemos la imagen de la LUZ enfocada tan poderosamente como podamos durante algunos momentos, estaremos iluminando la imperfección y elevando su rata vibratoria hasta el punto en que su discordia o cualidades imperfectas no podrán ya existir.
Esta es la manera más fácil de mantener los ojos tan ocupados haciendo algo constructivo, que no tendrán tiempo para deambular por allí y posarse sobre lo que no es constructivo. Al establecer este hábito, invoquen a su Magnífica Presencia I AM a la acción para que los haga hacer eso todo el tiempo, y los haga olvidar ver toda imperfección doquiera que vayan.
Recuerda siempre que tu habilidad de ver cualquier cosa es la Actividad del Ojo-Todo-Avizor de Dios, que la Magnífica Presencia I AM te presta para que lo utilices en el mundo físico. ¡Se te considerará responsable si le permites ver menos que la PERFECCIÓN!
La Voz del I AM, Mayo de 1937. Saint Germain Press.

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