domingo, 15 de enero de 2012

EXPLICACIÓN DE "EL BORDE DE SU VESTIDURA"/Amado Arcángel ZADKIEL


 ¿Qué es "el borde de su vestidura"? Es la periferia de su vehículo emocional, amados Míos, al cada vehículo encajar dentro del otro. Su vehículo etérico interpenetra y rebasa a su cuerpo físico; a su vez, el mental interpenetra y rebasa al etérico, siendo interpenetrado a su vez por el vehículo emocional, a través del cual su vida fluye. ¡Ese es el borde de su vestidura!
 ¿Acaso todos aquellos que la tocan se curan de la aflicción, reciben consuelo y paz, son resucitados y renovados en mente y cuerpo, en conciencia? De ser así, pues ¡bendita sea la Luz de ustedes! Si todavía les queda por reanimar esa vestidura espiritual, entonces bendito sea su deseo altruista, motivado por la solicitud de ayudar al Dios que los hizo. Aquellos de Nosotros que sirven con ustedes traerán en, a través y alrededor de ustedes más y más de la Gloria y Perfección del Reino de Dios.
 La Divina Música y Armonía de los Ángeles, los Serafines y Querubines, al tiempo que se desplazan por el espacio en sus tareas asignadas, esa Música será la herencia de la Tierra y Su gente cuando la mismísima Tierra, moviéndose sobre un eje enderezado, emita el canto y el pean de alabanza y gratitud a Dios por la vida y por todo lo que sobre la Tierra hay; cuando todo ser humano será consciente de los magníficos regalos de vida en la Tierra, en los elementos Agua, Tierra y Fuego, los cuales han sido sirvientes dispuestos de la raza humana a lo largo de aeones.
Una de tales actividades que traerá música a sus empeños, auras y Tubos de Luz es la GRATITUD A DIOS, GRATITUD A SU PRÓJIMO, GRATITUD A LA NATURALEZA, ¡GRATITUD A TODO LO QUE EXISTE. Esto eleva la rata vibratoria de sus vehículos internos, y es una medida de salud aún para sus vestiduras de carne; gratitud para con su corazón y los órganos que componen sus vehículos; gratitud para con sus manos y pies, sus ojos y oídos —TODOS ellos sirviéndoles a lo largo de la encarnación, dándoles la flexibilidad y movilidad de su última expresión potencial.
 Amado Arcángel Zadquiel, en el libro "Diario de El Puente a la Libertad/Saint Germain". Serapis Bey Editores S.A.

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